Lo Mejor Sigue Estando Por Llegar

sábado, 14 de enero de 2012

Pies en pared



Chispa más o menos el partido del miércoles y el de hoy han sido un calco con la diferencia que el Español no es el Valencia.

El Sevilla volvió a apretar en la primera mitad donde hizo un juego más que aceptable hasta que a Reyes le duraron las fuerzas, pero una vez más no marcó. Y Kanouté en el banquillo.

Y cuando salió Kanouté por Negredo (parece que Marcelino quiere morir con su idea de poner un delantero solamente), el equipo no llegó ni la mitad de la mitad de las veces de lo que hizo en la primera mitad.

Después en rueda de prensa más de lo mismo. Excusas, lamentos pitos y flautas. Palabras que, a la hora de la verdad son solo eso, palabras.

Pero hoy, otra vez más, segunda ocasión en tres días, enfrentamientos de aficionados con jugadores.

El otro día con Spahic, hoy con Perotti.

Las primeras informaciones llegadas por la red de redes es que han provocado al jugador.

Las últimas, que más bien es el jugador el que ha hecho por llegar a las manos y las ostias (que no consagradas como la de los curas) iban y venían hasta la mitad de la calle con jugadores y técnicos presentes.

Hay que ser gilipollas para llegar a las manos por un tema tan banal como el fútbol.

Si es el aficionado el que ha provocado, lamentable su actuación y, lamentable, que un profesional que se dedica al fútbol no le "resbale" y se líe a ostias con el aficionado.

Pero si la versión fuere la segunda, ese jugador no debiera vestir más nuestra camiseta.

Sea como fuere, la situación es delicada y alguien debiera poner pies en pared.

Pero hoy el Club da la sensación de estar desatendido en lo que a llevar el timón de la nave se refiere.

Soluciones.

2 comentarios:

Miguel dijo...

Si tuviera decencia el señor Marcelino debia de dimitir

Anónimo dijo...

Difícil solución,Manolo. Es hora de tomar decisiones dentro del club pero parece que quien debe hacerlo anda en otros menesteres más personales.Va a ser hora de que los aficionados sevillistas demostreis una vez más (y la historia está llena de ejemplos) a los dirigentes que con vuestro sentimiento y dinero no se juega.
Buena suerte y seguid en la lucha.

Emilio V.