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lunes, 1 de febrero de 2010

El Sevilla-Valencia según M.A. Ibáñez

De vuelta a la Champions

El partido de anoche era como una final. Los dos equipos se jugaron de tú a tú, y el estadio presentaba una gran entrada para ver este duelo de aspirantes a la tercera plaza de la liga.

En los primeros minutos del partido, los dos equipos se tenían mucho respeto y hubo algunas imprecisiones en el medio campo que hizo que se perdieran algunos balones. Pero fue el Sevilla quien parecía llevar la batuta del partido. El conjunto andaluz lo intentaba en estos minutos iniciales, con un Navas explosivo, y con la vuelta de Kanouté a la titularidad acompañado de Negredo. Pero ayer fue el partido del madrileño Álvaro Negredo, y su reivindicación como gran futbolista que es. De sus botas nació el 1-0 casi a mitad del primer tiempo, en un córner botado por el argentino Perotti que abría la contienda. El Valencia tras todo esto llegó al descanso perdiendo en el marcador sin generar excesivo peligro, y con un gran enfado de su entrenador Émery.

Tras la reanudación, el Valencia parecía que quería meterse en el partido pero no acaba de hacerlo. Sólo la gran calidad de Silva podía hacer algo, porque Villa no tuvo su noche. En cambio, los sevillanos seguían practicando un fútbol directo que no acababa de materializarse. Y fue en el minuto 23, cuando llegó la genialidad de la noche con el gol de vaselina de Negredo que hizo levantar de los asientos a la grada, para aplaudir esta obra de arte. En una jugada conducida por Navas cede el balón de tacón a Negredo que está casi fuera del área, para que éste con un magnífico toque coloque el esférico por encima de César y haga el 2-0. El gol es para quitarse el sombrero. Con esto el jugador madrileño calla muchas bocas que lo criticaban al inicio de la temporada por supo poca efectividad de cara a gol. Perdiendo por dos tantos el Valencia lo intentó con todo arriba, y casi al final del tiempo reglamentario acortó distancias, debido a que el Sevilla se echó atrás cediendo terreno al conjunto valenciano. Pero al final no hubo sorpresas y el Sevilla se hizo con la victoria en un partido bonito y disputado, y recupera su más que merecido puesto de liga de campeones. Aunque todavía hay que recuperar el tercer puesto, ya que hemos rebajado la distancia con el Valencia a tres puntos.

Ahora mirar al futuro próximo y pensar en la Copa que está a la vuelta de la esquina.

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