La verdad no sabría como empezar y analizar el partido de hoy ante Osasuna. De entrada me quedé estupefacto al saber que Luis Fabiano no jugaba, y Cáceres tampoco. Sobre todo el primero, pues me digan lo que me digan es archi infinitamente mejor que Negredo, pero en fin, el entrenador es el que los ve a diario.
Pero vamos, tampoco hay mucho que ver para darse cuenta que Kanouté es de largo, y a sus años, el mejor de la plantilla. Y como no, Navas, que vuelve después de tres meses en el dique seco y parece que no le ha pasado nada, pues vuelve a ser de los mejores.
El resto, entrenador incluido, nada de nada. Cero. La más absoluta nulidad.
Si este es el equipo por el que no nos tenemos que preocupar porque seguro estará en Champions el año que viene...Que quieren que les diga, yo viviré en otro planeta pero no lo veo por ninguna parte.
No veo equipo. Hace ya tiempo, como ya saben, el equipo era extraordinario en todas sus líneas. Con Jiménez, el equipo dejó de ser extraordinario y pasó a ser un buen equipo que para mi gusto jugaba mal. Pero al menos dominaba su área.
Con Álvarez ocurrió lo contrario, arriba se era mejor que atrás.
Con Manzano no lo veo bien ni atrás, ni adelante y, por supuesto, ni en el medio.
Y todo esto, para que luego no hablen algunos de ventajismo lo digo la noche en la que el Sevilla ha vencido por 1-0 a Osasuna, con gol, de quién si no, de Kanouté, de cabeza, por una falta botada por Navas.
La afición está revuelta. La afición se pregunta por qué no viene nadie, más aún cuando hay un jugador al que se le puede dar la baja federativa por lesión. Aunque vamos, que por ese motivo se le podría haber dado en su día a Koné, o se le podría dar a Fazio.
Pero señores, el problema es la pasta. Hay 25 futbolistas profesionales, que aunque les des de baja hay que seguir pagándole sus nóminas. Y, estando todas las fichas cubiertas, para que alguien entre, alguien tiene que salir. ¿Cuáles son los candidatos que todos nominaríamos para salir? Konko, Cigarini, Romaric, Navarro...Cuestión de gustos. La pregunta es, a los equipos que estos jugadores puedan interesar, ¿van a pagarles lo mismo que les paga el Sevilla?
La respuesta es bien sencilla, y es uno de los motivos, por ejemplo, por los que Romaric sigue con nosotros y no está en el Zaragoza.
La situación es arto complicada, esperemos que los Reyes no traigan carbón.
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