Lo Mejor Sigue Estando Por Llegar

martes, 9 de noviembre de 2010

24 horas

Quizá sea un poco desfasado, puede ser, pero es que hasta ahora mismo no me he podido sentar para comentar algo del partido de ayer. Casi 24 horas después. Y cuando quedan otras 24 horas para el siguiente partido.



Vamos a empezar por lo más importante, los tres puntos y no quedarse casi descolgado a las primeras de cambio de la zona noble de la tabla. El acierto de Cáceres, el cambio de un año a otro de Negredo y el aprovechar lo poco que le dan a un chaval que tiene la desdicha de ser español, de la cantera, de no haber costado ni un duro y, por tanto, tener que demostrar más que otros que valen mucho pero aportan poco, que tiene su sitio en el Sevilla. Evidentemente, Alfaro. Y me gusta más por el medio que en la banda.



Eso en cuanto lo positivo. Pues al principio dije que hasta ahora no he podido escribir, cosa no cierta del todo. Anoche tras el partido tuve una oportunidad, pero lo cierto y verdad es que me aburrí tantísimo, fue tal el sueño que me dio el partido que me metí directamente en la cama y caí redondo.

Ya lo he dicho, contentísimo como sevillista por lo logrado. Pero como aficionado al fútbol, si los dos equipos de ayer son las "alternativas" más o menos serias a los dos grandes, tenemos un problema grande.

Sinceramente, yo vi un despropósito de partido. Por parte de ambos. Pero más de los ches. Si lo que hizo ayer el ínclito Emery lo hace mi tocayo del Arahal ayer se lía. Horrendo partido tácticamente que se desatascó con la salida del cada vez menos cuestionado Negredo y tras jugada de Cáceres, el mejor de ayer, al que le dejaron conducir el balón durante 60 metros.

Porque hasta entonces el Sevilla andaba muy mal, tanto que era "encerrado" en su campo por un equipo que jugó casi 70 minutos con uno menos con una dura entrada de Topal a Cáceres.

Fijaos en la siguiente imagen y decidme de qué os suena:



No se si lo habréis adivinado. Salen cuatro de los nuestros celebrando uno de los cinco goles que metimos en la guarida del Real Madrid en la Final de la Supercopa de España. De eso hace ahora poco más de tres años.

¿Recordáis? Tres goles de Kanouté y dos de Renato. Hace tres años ellos fueron la delantera titular en ese partido. Era la opción para el ataque cuando sólo jugábamos con un delantero puro.

Y ahora recordad dónde jugaron ayer ambos. 30 metros por detrás. Tres años después, la que fuera delantera del Sevilla hoy es la media "más fiable". Hoston, tenemos un problema.

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