Historia viva

Luis Fabiano Clemente es ese tipo de jugador que no deja a nadie indiferente. Es ese tipo de jugador en el que en el minuto 70 del partido te estás acordando de él y de todas sus castas enteras porque no ha hecho nada, y cinco minutos más tardes das mil gracias porque viste la camiseta de tu equipo.

O'Fabuloso, un delantero genial con un defecto, su cabeza, para los sevillistas un defecto maravilloso, pues de no tenerlo es el típico delantero que sólo podríamos ver en equipos de la talla del Manchester, Chelsea, Inter, Bayern, Madrid o Barça.


En su primer año con nosotros le aguantamos carros y carretas. Después marcó un gol, el primero de la final de nuestra primera Uefa (el de la foto que he puesto), que para él y para nosotros supuso un punto de inflexión, tanto que a día de hoy este genio brasileño es el quinto jugador de nuestros más de 105 años de vida que logra alcanzar el centenar de goles, tras Guillermo Campanal, Arza, Araújo y Kanouté.

¿Y sabéis lo peor de todo? Que me queda el regusto amargo de saber que podía haber marcado bastantes más.

Grande O'Fabuloso.