Hoy tocaba uno de los partidos más esperados de la temporada. Jugar contra el mejor equipo del mundo.
Empezó el partido con homenaje a uno de los más grandes de nuestra historia que se nos va. Suerte. Ojalá no te echemos mucho de menos.
Además, el comienzo del partido sirvió para aplaudir uno de esos gestos que, mucha veces, tenemos que agradecer a los miembros de la organización del Club porque demuestran grandeza y señorío. Camiseta apoyando a un jugador del Betis ante un momento difícil para este jugador.
Señores, cuando hay que dar palos se dan, y cuando hay que ponerse las palmas de las manos colorás de aplaudir, se hace igual.
A partir de aquí empezamos con lo futbolístico:
Si hoy el del banquillo hubiera sido otro, al descanso hubiéramos podido tener una película en las gradas.
Alineación totalmente condicionada al rival, con Capel y Navas cambiados de bandas, básicamente para que éste último tapara las subidas de Alves. Una vez más ante el Barça, Navas haciendo de falso lateral, esta vez por la izquierda.
Cierto es que si no te condiciona una alineación el mejor equipo de todos los tiempos...Pero el partido fue un pim, pam, pum. Jugadores del Sevilla en el campo viendo pasar a los adversarios y sin competir.
Esto, para mí, se merece palos, y muchos.
Evidentemente, Kanouté no estaba en el campo.
Y es que, a lo largo de la semana, con la lesión de Perotti e igual de LF10, yo tenía muy clara la alineación. Sólo tenía dudas de si sería Negredo o Kanouté el punta. Eso sí, no me esperaba el cambio de los jugadores de banda.
En la segunda Kanouté salio de inicio por un desdibujado Zokora y entonces el Sevilla compitió. Pudo ganar y pudo perder, pero Medel salvó dos goles. Pero lo más importante es la sensación que se dejó. Quizá más importante incluso que el punto conseguido. El Sevilla miró cara a cara al mejor equipo del mundo y lo puso contra las cuerdas.
Partido nefasto del árbitro que pudo favorecer al Sevilla o no, depende del ojo que mire las jugadas y de lo riguroso que seamos.
Varias cosas tengo claras:
Varas debe seguir en la puerta hasta el final del año.
Medel y Rakitic aportan cosas que este equipo no tenía.
Y con un partido a la semana...salvo que esté lesionado, Kanouté sigue siendo de largo el mejor del equipo y tiene que jugar.
Estamos séptimos. Quedan 10 partidos y sigo viéndolo muy difícil. El tiempo dirá.
3 comentarios:
Manuel, pues no que te veo hasta optimista?
Lástima que solo compitieramos 45 minutos, pero la verdad es que en la segunda parte hemos visto al mejor Sevilla de esta temporada.
Un beso
Manuel, en su dirección de somerset tiene usted un e-mail que le puede interesar.
Un abrazo.
Hombre, que honor. que dos ilustres blogueros que vuelven a escribir aquí.
Sí Mayte, yo como los salmones, a contracorriente.
Cuando las cosas van bien, criticar. Cuando están mal, a ver lo positivo.
Raro que es uno.
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